Este Cuento es una versión libre sobre la ausencia del amor (Linda) y el mito griego de Penélope encarnado en la vida de un hombre (Juan Michellena), quien se quedo esperando el retorno de su amada, que nunca jamás volvió.
Autor:RafaelRosado Correo:rafael.rosado@yahoo.com
Parece mentira, tanta belleza junta. !Linda...¡ Su nombre lo expresa todo. En ningún jardín existen flores que igualen su hermosura. Sus cabellos dorados, superan al trigo maduro, sus grandes ojos verdes, semejaban dos esmeraldas campestres, brillando a la luz de la luna. Su cutis facial, tan suave y delicado como un rió de aguas mansas. Su cuerpo de guitarra valenciana se contoneaba como “el aleteo de una sirena de mar” y sus finas manos poseian más candor que el trozo mas pulido de ámbar cristalino. Un sol naciendo en la mañana, así era ella, radiante de hermosura.
Autor:RafaelRosado Correo:rafael.rosado@yahoo.com
Parece mentira, tanta belleza junta. !Linda...¡ Su nombre lo expresa todo. En ningún jardín existen flores que igualen su hermosura. Sus cabellos dorados, superan al trigo maduro, sus grandes ojos verdes, semejaban dos esmeraldas campestres, brillando a la luz de la luna. Su cutis facial, tan suave y delicado como un rió de aguas mansas. Su cuerpo de guitarra valenciana se contoneaba como “el aleteo de una sirena de mar” y sus finas manos poseian más candor que el trozo mas pulido de ámbar cristalino. Un sol naciendo en la mañana, así era ella, radiante de hermosura.