El siguiente texto fue escrito en su totalidad por la comunicadora Yadiris Santos quien destapa los maltratos de los cuales fue víctima en su relación de pareja. Ella trabaja para la radio y televisión de Navarrete:
HABLEMOS CLARO!!!
He hecho está columna en mi Facebook como una forma de exponer situaciones que buenas o malas trascienden a lo individual.
Hoy escribo un tema particular de la cual surje afectada quien suscribe pues aparentemente se determinará mucho de mi tranquilidad personal.
Mantuve una relación con el señor Felipe Gómez Genao 3 de mis 4 hijos son de él en la misma fui violentada física, psicológica, verbal y económicamente, mas todos los demás actos que contemplados en la ley 24-97 se consideran acápites de maltrato a la mujer en la Constitución Dominicana, mis familiares amigos y allegados son testigos oculares y directos de lo dicho aquí y mis pequeños hijos también lo fueron.
Quien me conoció en esos momentos me vio pasar hambre, frío, penurias, desnudez y un sinnúmero de cosas más que por denigrantes me reservo en detalles, todo esto en gran medida por la debilidad mental que en esos momentos yo albergaba, en el 2013 cansada de haberle dejado los mejores años de mi vida, le puse una querella en la cual duró 7 meses preso en alguna cárcel, desestime la querella por garantía familiar y porque supuestamente iba a cambiar.
QUE GRAVE ERROR. Esos no cambian, cuando vio que yo tenía ciertas dudas me volvió a agredir y luego de poner nuevamente una querella, casi un año después la policía lo atrapa, teniendo actualmente medida de coerción. Hoy lo enviaron a juicio de fondo.
Que quede claro que solo exijo mi derecho a vivir, si queda preso pagará lo que me ha hecho a mi y a otras mujeres maltratadas por semejante individuo, si por el contrario queda en libertad, yo seguiré caminando plácida por la calle trabajando para mí y mis hijos, e iré temprano a laborar y por la noche me recreare dónde me plazca, porque nadie es dueño de la vida de nadie y el no es mi dueño.
No estoy sola y YA NO TENGO MIEDO, cuento con un fuerte apoyo de La Familia Luna, Familia Cabrera, mi padre, mis hermanos, amigos, compañeros, colegas, colaboradores e incluso gente que sigue mi labor como comunicadora y gestora cultural, sector empresarial, grupos sociales.
En fin, no estoy desamparada, no estoy sola. NO SOY LA MISMA ha llovido mucho después de eso pero, que la justicia decida, yo veré mis hijos crecer hasta donde Dios quiera y con Dios delante no seré una más.
Posdata: Las fotos debajo fueron parte de la última agresión.
