El 31 de enero de cada año se celebra en nuestro país el Día Nacional de la Juventud, en honor a San Juan Bosco, el llamado Padre y Maestro de la Juventud, un santo que se dedicó completo al trabajo con los jóvenes de las calles y delincuentes de la Italia del Siglo XIX.
Don Bosco, el santo de los/as jóvenes, fue declarado “Padre y Maestro de la juventud” por Juan Pablo II. Una vida entera dedicada a los/as jóvenes, especialmente los/as más pobres, para llevarles el amor de Dios.
Esta Fecha fue establecida mediante ley 10-93 la cual también instituyó el Premio Nacional de Juventud, para el cual se realiza todos los años un gran acto.
Esta ley viene a ser también un complemento al decreto No.2981, que creó la Dirección General de Promoción de la Juventud como organismo oficial rector de la política nacional de juventud.