Si estabas durmiendo una noche y te has despertado asustado o asustada porque creías que te caías por un agujero negro que te llevaba al vacío, no te preocupes, ya que es algo normal.
Según un estudio, el 95% de la población ha pasado por ello en alguna ocasión.
El susto que te produce es evidente y provoca a los que la sufren una ansiedad importante, una sensación muy similar a cuando tenemos una pesadilla.
Pero... ¿Por qué se produce? Los expertos apuntan, de forma principal, a tres factores: un sueño poco desarrollado, un cuadro de estrés generalizado y el fenómeno de la parálisis del sueño.
Es probable que padezcas esta sensación a los pocos minutos de haberte tirado en la cama y hayas cerrado los ojos.
La descompensación en el sistema vesticular y el cinestésico provoca una falta de adaptación del cuerpo a nuestra posición (tumbada), algo que hace que las personas que lo sufran (siete de cada diez lo padecen habitualmente) crean que caen al vacío o que incluso puedan caer de su propia cama.
Algunos estudios apuntan al estrés como un elemento indispensable para que se produzca. Si el cerebro está muy activo, las ondas trabajan por encima de su rendimiento habitual.
Cuando dormimos, el cuerpo se paraliza pero el cerebro continúa trabajando, algo que provoca la descompensación y el desarrollo de este fenómeno.
Esta sensación de caer al vacío también está muy relacionada con las "mioclonías de adormecimiento", esas contracciones musculares que se caracterizan por ser breves y completamente inesperadas.
Por último, otras voces aseguran que la parálisis del sueño- el trastorno que se produce entre el sueño y la vigilia y que hace que el cuerpo y el cerebro tengan independencia- es también responsable de la sensación de caerse al vacío mientras dormimos.
¿Cómo evitarlo? Muchos investigadores apuntan a la necesidad de dejar dos horas entre la cena y la hora de irse a dormir e intentar abstraer de la mente de todos los temas que puedan estresarnos.